Su objetivo es prevenir conductas abusivas, violencias machistas y discriminaciones por motivo de diversidad de género funcional, étnica y cultural a través del desarrollo a las aulas de actividades didácticas de carácter curricular.

La primera fase de la prueba piloto del programa se ha llevado a cabo a lo largo de los cursos 2014-2015 y 2015-2016 en seis escuelas y cinco institutos de Barcelona, y actualmente se está desarrollando la segunda fase. Se prevé que a partir del 2018 se implante progresivamente en todos los centros de la ciudad.