Este grupo de trabajo estaba formado por catorce personas y se realizaron seis sesiones.
Lo que tenía que trabajar el GT se basaba en marcos legales y normativos establecidos en el ámbito estatal, comunitario, provincial y municipal. Las conclusiones que se han extraído son:

  1. Respecto a la propuesta de un nuevo texto para regular la ordenanza cívica: es importante que el objetivo de esta ordenanza no sea sancionar, sino educar. Lo primero que se tiene que hacer es una advertencia, a partir de aquí, sanción.
  2. Estudiar la convivencia de sustituir la OMC por un código de buenas prácticas para la convivencia y divulgarlo sistemáticamente de forma pedagógica.
  3. Reconducir a las ordenanzas sectoriales los tipos infractores que regula la OMC.
  4. No suprimir el fichero de antecedentes de personas infractoras a la convivencia.
  5. No incluir en la publicación de notificaciones en los diarios oficiales referencias que permitan asociar el nombre de presuntas personas infractoras.
  6. Perseguir la reparación de los daños por incivismo.
  7. Poner en funcionamiento el Observatorio de la Convivencia con representación del CDC.

Un dictamen aprobado por el plenario el julio de 2017.